31 octubre, 2007

Poeta a los 82

Encontré “El poema de los 82 años” de Ángel González y lo disfruté. Lo transcribo, para gozo de quienes no lo conozcan:

Ha pasado casi un siglo.
Soy un señor muy antiguo.
O mejor;
lo que queda de un señor:
unos restos
desvaídos,
algún gesto
que pretende ser cortés.
Es poco, pero algo es.

Dicen que el agua pasada
No mueve molino.
Pero el río de la vida
que pasó
sigue moliéndome vivo,
hecho polvo
enamorado
del agua, del agua aquella,
cuyo murmullo lejano
aún oye mi corazón.


¿A que es consolador que exista gente así, entre tanta ramplonería?

30 octubre, 2007

Ideas brillantes

Sobre el hombre:

“El señor Bernard Shaw no puede entender que lo que es valioso y amable a nuestros ojos es el hombre, el viejo hombre que bebe cerveza, inventa credos, lucha, fracasa, el sensual y respetable hombre. Y las cosas que se
han fundado sobre ese ser perduran inmortales; las cosas que se han fundado en la fantasía del Superhombre han muerto con las civilizaciones moribundas que son las únicas que las han producido. Cuando Cristo, en un momento simbólico, estableció su gran sociedad, eligió como piedra fundamental no al brillante Pablo ni al místico Juan, sino a un confuso, un nov y un cobarde: en una palabra: un hombre. Y sobre esa roca construyó su Iglesia, y las puertas del infierno no han podido contra ella.”


Sobre viajar o quedarse:

“El trotamundos vive en un mundo más pequeño que el campesino. Siempre está respirando un aire de localidad. Londres es un lugar que puede compararse con Chicago; Chicago es un lugar que puede compararse con Tombuctú. Pero Tombuctú no es un lugar, porque allí al menos, viven personas que lo consideran el universo, y respiran, no el aire de localidad, sino los vientos del mundo, El hombre de trasatlántico ha visto todas las razas de hombres, y está pensando en las cosas que dividen a los hombres; la dieta, la indumentaria, el decoro; anillos en la nariz como en África, o en las orejas como en Europa. El hombre de la plantación de coles no ha visto nada de nada, pero está pensando en las cosas que unen a los hombres: el hambre y los hijos, la belleza de las mujeres y la promesa o la amenaza del cielo. El señor Kipling, con todos sus méritos, es el troamundos; no tiene paciencia para llegar a ser parte de nada.

(“Herejes” G.K. Chesterton, Acantilado)

29 octubre, 2007

El revés de la trama

“El revés de la trama” título de una obra de Graham Green que leí cundo era joven, hace referencia a que mientras estamos aquí, al contemplar lo que ocurre, en nuestra vida y a nuestro alrededor no entendemos nada. Es como si contempláramos un tapiz del revés: nudos, cabos ..,algo que no tiene ni belleza ni lógica. Solo al cruzar el umbral de la eternidad, podremos ver el tapiz por la cara.

Un tapiz que nos convencerá. Me acordé de esto cuando Concha me hablo de su hijo Rafael. Creo que vale la pena contarlo.

Rafa, desde muy joven – ahora tiene 38 años – decidió vivir el celibato apostólico por el reino de los cielos. Su madre no tendría nietos porque sus seis hijos habían decidido lo mismo, como la familia de Bernardo de Claraval en el sigloXI, Hace unos cinco años, Rafa, aconsejado por quien podía hacerlo, dejó la Institución a la que pertenecía. Salió con las manos vacías dispuesto a empezar. Ahora tiene novia: Farmacéutica con Farmacia. Es ella la que “ha ido a por él” –según dice su madre -. Se llama Esperanza ( Concha si Dios quiere tendrá nietos).

De niño, Rafa yendo en el autobús al Colegio, este por fracción de segundos no fue arrollado por el tren. Era un dieciocho de diciembre, festividad de Nuestra Señora de la Esperanza.

Cuando Concha me lo contaba, completé la historia: hay un punto en “Camino” que dice (a los jóvenes) algo parecido a esto:

Encomiéndate al Arcángel San Rafael para que te encuentre una mujer buena guapa y rica…

28 octubre, 2007

Lo que ha traído San Judas

El año pasado, el 28 de octubre, festividad de San Judas Tadeo, me robaron el bolso con dinero agenda y documentación, mientras estaba abstraída leyendo en una terraza. Lo conté, me acuerdo. Esta noche, pasada yendo al baño por un trozo de pastel, hecho por “Carmen de España”, arnadí se llama el pastelito de Játiva hecho con calabaza, almendra y canela, que será difícil que olvide, he recordado a San Judas y le he adjudicado, es un decir, la jugarreta del cólico. En realidad, como patrón de mi familia que es, me ha dado ocasión de merecer un poquito.

Al levantarme he puesto la televisión para ver la beatificación de los mártires españoles, muchos de ellos entre 16 y 19 años, y he pensado que no había ninguno en mi familia. Porque unas cosas traen otras que con ellas se emparentan, he recordado a mi padre. ¿Ser fiel a una sola mujer, la que se ha tomado en el altar de Dios, durante toda la vida, siendo alto, guapo y buen profesional, no es una especie de martirio? Ah¡ el santo temor de Dios, ¡cuántas lágrimas ha evitado¡.

Luego he bajado al quiosco y he visto que “Las Provincias “ me ha sacado “Con Concha”, que hace días que mandé. Que esperen a publicarla en domingo, es una cosa que agradezco.

Esta tarde viene a merendar mi gente aunque yo siga en ayunas….

27 octubre, 2007

"¿Qué es poesía?"

Entenderán los chicos y chicas de ahora, esa rima de Bécquer?.¡ ¡Ojalá sean capaces¡ Hace poco, busqué la “Antología de la poesía española” que manejaban mis hijos cuando iban al Colegio. Me encontré, con la letra de niño de Juan escrita a bolígrafo la palabra “bestial” al lado del nombre de Bécquer. Sonreí. Para Juan, en aquellos años, “bestial” era el adjetivo calificativo supremo y casi único. Cuando se iba de campamento y escribía a casa, además de decirnos que nos echaba mucho de menos, decía que lo pasaba bestial. Busqué el libro para leerle algún poema a mi nieta Marta y tratar, si le gustaba, que se lo aprendiese. Marta, con sus ocho años, demuestra sensibilidad literaria ( se ha aprendido, casi entera “La leyenda de Mío-lo San” y se arrebola y eleva la voz, como si a ella fueran dedicadas cuando dice lo de “Princesa hermosa, como ninguna”.

Le leí pues la “Canción del Pirata”, que ella ya conocía y cuando llegué a recitar: “¿Qué es mi barco?, mi tesoro/ ¿Qué es mi Dios, la libertad? / Mi ley, la fuerza y el viento / Mi única patria, la mar”, me hizo repetirlo un montón de veces para aprendérselo. Se pasa bien con los nietos.

Luego me quedé pensando esa estrofa y caí en la cuenta de algo que quizá Zorrilla no pensase cuando lo escribió. Se le ocurrió pensar en que cuando uno está con Dios, y solo entonces es realmente libre?

Isabel, Isabel...

Mi amiga Carmen, a la que yo llamo Carmen de España, porque es guapa, con un tipo bonito, a lo Audrey Hepburn, sonriente y festera – yo le digo que tendría que pedirle a Dios un novio, porque no le cuadra el estado civil de viuda, madre de tres hijos, sin ser para nada una viuda alegre, me contó una vez algo que quizá valga la pena transcribir. Sirve por otro lado para dedicar unas líneas a la Madre de Marco Polo – otro de los nombres que le doy, porque su hijo mayor, que vive en Venecia, tan pronto está en New Cork como en China – que a veces me ha echado en cara que no he escrito una sola línea sobre ella.

Cuando Carmen era niña, y al acortarle el vestido de organdí de su primera comunión, para que lo siguiera llevando, le hicieron con la tela que sobraba de la falda una pamela a la que le añadieron un par de bonitas cerezas rojas, con los que se paseaba se paseaba sintiéndose la reina le los mares, frecuentaba la casa de una vecina, a la que por su edad de ésta, adoptó como abuela. Ella no tenía ninguna y una abuela es necesaria. Carmen se sentía bien en ese hogar, que no era el suyo. Sentada en una sillita baja y en silencio, observaba la vida que allí transcurría. Su “abuela”, en silencio, siempre atareada con los trabajos de la casa o con la labor en las manos. El marido de ésta, siempre sentado en un sillón sin hacer nada. De vez en cuando el musitaba estas palabras: “Isabel, Isabel…”. Isabel no respondía. No hacía falta. Seguía trabajando. Ella estaba allí, y él se sentía seguro.

25 octubre, 2007

La ciudadanía y un inglés sabio

A mí eso de la ciudadanía me gusta poco. Me trae resabios de cabezas cortadas en la Place de la Grève. Tampoco me gusta nada que el estado, se salga de madre, nunca mejor dicho (a las madres nos gustar ser nosotras las que eduquemos y aquellos en quien delegamos) nos amenace moldeando a todos los que aún no está moldeados, con “La educación para la ciudadanía”, la nueva asignatura que los socialistas se han sacado de la manga. Pero de esto ya hablé. Si me acuerdo ahora de la guillotina es porque he leído con gusto “Lady Ludlow” de Elizabeth Gaskell (1810-1865), en la que entre otras cosas, Virginie y Clèment, ambos de ancia aristocracia, pierden sus jóvenes y hermosas cabezas, él por salvarla a ella y ella por no querer casarse con el plebeyo señor Mourin que con esa condición la libraba de la cuchilla. Como siempre me ha dado, llegar al punto final y desprenderme de esos y otros personajes cuyas peripecias he seguido a lo largo de 280 páginas.

Ahora he empezado a leer “Herejes” de mi amigo Chesterton. ,(¡874-1936) Me la ha regalado Juan, y el catalizador para ello ha sido encontrar en “El País Semanal” una pequeña columna titulada “¡VIVA Chesterton¡” que dice entre otras cosas: “.. su obra atravesada entera por un quirúrgico método paradójico tan agudo como fascinante, resulta en los tiempos que corren más que deslumbrante. Quizá por ello, y con el permiso de Borges que idolatraba, siempre dentro de sus parámetros emocionales, a Chesterton, el autor inglés ha sido recuperado en los últimos tiempos por varias editoriales.”

Cuando se tiene sentido común, talento, valentía y amor a la verdad, las obras literarias, no solo atraviesan los siglos sin problemas, sino que en el caso de Chesterton cabalgan por ellos bizarra y alegremente.

Cuando Juan tenía alrededor de 17 años, yo puse en sus manos “Ortodoxia”. Ahora que tiene 38, él ha puesto en las mías “Herejes”. Educar es eso, entre otras cosas.

21 octubre, 2007

Libros que quiero leer

Como no podía ser menos estoy disfrutando enormemente “Jesús de Nazaret” de Joseph Ratzinger. Algo caerá aquí de él, Pero es difícil seleccionar cita, porque todo es interesante. De pasada habla en él el autor de un libro que le gusta: “Un rabino habla con Jesús”, razón por la cual quiero leer ese libro. Hay otro que compraré, lo recomienda Juan Manuel de Prada en el Semanal ( único artículo el suyo que leo), se trata de “La abolición del hombre” de C.S.Lewis (ediciones Encuentro).

Dice Juan Manuel de Prada en su artículo: “ Los antiguos educadores acataban esa ley natural , común a todas las tradiciones culturales, a la que nos referíamos en un artículo anterior; no trataban, por tanto de educar a los niños conforme a unos esquemas establecidos por ellos mismos. “ Pero los que moldean al hombre en esta nueva era – vaticina Lewis – estarán armados con los poderes de un estado omnicompetente y una irresistible tecnología científica: se obtendrá finalmente una raza de manipuladores que podrán verdaderamente moldear la posteridad a su antojo.”

Y otra cita: “C.S.Lewis no presupone que estos manipuladores sean personas malvadas, “pues ni siquiera son ya hombres en el antiguo sentido de la palabra. Son si se quiere, hombres que han sacrificado la parte de humanidad tradicional que en ellos subsistía a fin de dedicarse a decidir lo que a partir de ahora ha de ser la Humanidad”

Será bueno difundir un libro que ayude a contrarestar, entre otras cosas el efecto de la nueva asignatura que se han sacado de la manga los socialistas:
“La educación para la ciudadanía”

20 octubre, 2007

Con Concha

Hace mucho tiempo que no veía a Concha, por eso la conversación ha sido larga. Había mucho que contar. Por otro lado Concha y yo nos entendemos casi sin hablar porque nos conocemos hace más de treinta años y las dos amamos a Dios. Concha perdió a su hija Montse de 38 años este verano de un cáncer de útero y su madre de 92, sigue viviendo. “No me he rebotado ¿sabes?”. Lo sabía. A Montse la han cuidado, le llevaban la comida guisada en casa, porque no le gustaba la del IVO y también la vajilla, mantel y servilleta de tela. Y camisones bonitos. Es importante comer y vestir con esmero cuando el cuerpo se desmorona. “Que dibuje, que borde”, había dicho el médico. Y Montse, entregada a Dios desde los quince años, hacía baberos a punto de cruz para los niños de sus amigas y dibujaba burritos con alforjas llenas de frutos, flores y mariposas. Y daba las gracias a todo aquel que le prodigaba cariño y cuidados. Cuando fue la sicóloga a “confortarla”, le dijo que la muerte era algo natural. Concha al oírlo no pudo contenerse: “la muerte no es algo natural. El hombre no estaba hecho para ella. La muerte, después del pecado original, es la puerta para estar con Dios” La sicóloga, flipaba. “Tienen suerte de contar para esto con el recurso de Dios”,dijo. Y Concha continuó: “Dios no es ningún recurso, no es una llave inglesa necesaria en algunos casos.” Asentí. Y me contó que Mónica, su otra hija que hizo frente a la enfermedad de Montse dijo aquella se hubo marchado “Que no vuelva la sicóloga”, y no volvió. Realmente no hacía ninguna falta.

18 octubre, 2007

Mabel

Hoy hace seis años que murió, de un ataque cerebral, Mabel a los 43 años. Se fue con su quinto hijo de seis meses, de ese tiempo estaba embarazada. El nombre de Álvaro, se lo pondrían en el cielo. Para allá iban los dos. El día de antes había ido al retiro para madres que organiza Guadalaviar el Colegio y se había confesado. “Estad prevenidos porque cuando menos penséis, vendrá el Hijo del Hombre..”. A Ella, la cogió confesada. Mabel dejó una estela de bondad, simpatía y estilo. Me gusta recordarla cn vaqueros, addidas, jersey anudado al cuello con gracia y gafas de sol sobre el pelo a mechas metidas por el escote. Esta mañana cuando he pensado que era su aniversario, le he encomendado mi catequesis, que empezaba hoy día de San Lucas.

Y me viene a la cabeza una canción que le va: “Hasta luego Lucas, Lucas hasta luego…”. Mabel, que tenía siempre una sonrisa puesta y una palabra oportuna. Tenía gracejo. Era gaditana, como Pemán y poseía esa alegría de la mujer realista, de la luchadora nata que está en paz consigo misma, porque Mabel luchó mucho para sacar adelante a sus cinco hijos llevando además un sueldo a casa. Decía San Josemaría, unas palabras que bien pueden aplicarse a ella: “La entrega a los demás es de tal eficacia que Dios la premia con una humildad llena de alegría” (nº 657 de “Camino”)

He conocido a los niños por los que me toca rezar y enseñarles. Tienen ocho años. Quique, Rául, Dani, Victoria, Mª José y Paloma

16 octubre, 2007

"Cometas en el cielo"

“Cometas en el cielo”es un bonito el título de novela que invita a leer, lo que resulta ser una buena novela. Me hablaron bien de ella y la compré para regalársela a una amiga en su cumpleaños. La leyó en Benicasim, junto al mar lo que sin duda fue un lenitivo para la dureza que le esperaba con su lectura. Luego ella me la dejó para que la leyera, y ya se la he devuelto, por lo que no puedo aportar ni el nombre del autor. “Cometas en el cielo” engancha. Me gustó leerla. También creo que fue apropiada para la persona a quien iba destinada.

Contada en primera persona por un joven afgano, la acción se desarrolla desde Kabul en 1975 (invasión rusa de Afganistán) hasta ahora casi nuestros días en Estados Unidos, lugar al que llega el protagonista huyendo, como tantos otros afganos, de los talibanes. Su lectura casi no deja un momento de respiro. Abunda en ella la dureza, el mal moral y la perversión que tristemente pueden anidar en el corazón del hombre. Y ello me lleva a hacer una pequeña digresión: no ver en ciertos casos concretos de degradación y de humillación al hombre la presencia de satanás, es tener una miopía aguda. Pongo satanás con minúscula porque así lo escribió una vez un santo, diciendo que satanás no merecía otra cosa.

Creo que la lectura de “Cometas en el cielo”, además de conocer una historia entrañable sobre la amistad y el viaje a un país del que tan lejos estamos, puede aportar deseos de mejora personal y de compromiso. “Nada humano me es ajeno”, que decía Tertuliano. Y si hay hombres que son muy malos, tendremos muchos otros que ser muy buenos, para que se también se cumpla en el universo moral, lo que se cumple en el mundo físico: “a toda acción corresponde una reacción de igual intensidad y de sentido contrario”. No deja de ser esto una realidad cuando nos dolemos, sinceramente de nuestros pecados.

15 octubre, 2007

Teresa de Ávila

Cómo no pensar hoy en mis monjas teresianas¡.. Hubiese querido volver a coger la Vida de Santa Teresa escrita por ella misma en el castellano del siglo XVI, que tengo en tres tomitos con tapas de pergamino que tanto disfruté de moza, pero me ha arrollado la vida. Tuve la desfachatez, de subrayar en ellos, a bolígrafo, aquellos párrafos que me impactaban, razón por la cual no sería ahora difícil bucear en ellos pero todo requiere su tiempo. Volveré al 2007 y dejaré que el día este iluminado por tan gran mujer.

Hay un libro estupendo de su vida escrito por Marcelle Auclair, del que ya hable aquí. Y hay otro “Las Misericordias de Dios” (su vida contada por ella misma) de Cuadernos Palabra en versión de Antonio Urbina.

Gran fiesta en las Carmelitas y a mí me invita a comer al Zacarías mi jijo Juan que vivió mucho tiempo en México en Pedregal de Santa Teresa. Luego he quedado con Carmen José que lleva un nombre muy de acuerdo con el día: San José (Teresa decía que no recuerda haberle pedido algo a San José y que no se lo hubiera concedido) y el Carmelo. Me encanta haber caído hoy en la cuenta de lo teresiano que es el nombre de mi amiga, aragonesa y bravía como yo.

Este año, movida por buenos ejemplos, voy a dar catequesis en la Parroquia a niños de Primera comunión. Pondré aquí su lista de nombres, cuando los conozca, por si algien quiere ser su amigo invisible y rezar por ellos.Un buen negocio invertir en la infancia. “sus ángeles ven el rostro de Mi Padre Dios”. Ayer ví a Amparo, teresiana como yo en su formación de Colegio. Recordamos juntas tantos buenos ejemplos de monjas santas. A su nieto Martín, no lo bautizan…Ella siempre que puede le hace la señal de la cruz en la frente.. Hasta pronto

12 octubre, 2007

Las Pilares y otros asuntillos

Mi abuela Rosa, cuando era niña me enseñó eso de “cuatro pilares tiene mi cama, y cuatro ángeles que la acompañan…”. En cuanto a ángeles, el número me parece excesivo y no se si mi cama tendría cuatro pilares o no, pero en mi vida, Pilares hay muchas. Cuando esta mañana he llamado a mi amiga Pilar Abella para felicitarla, me ha recordado que una vez la saqué en el Diario de Teruel, en una columnilla que titulé “La Paella”, y que la empecé escribiendo: “A mí me enseñó a hacer paella Pilar Abella”. Y lo cierto es que me enseñó magistralmente, aunque Pilar lo que ha enseñado en la vida es a hacer dibujo de estatua. He felicitad a todas las Pilares y dado una limosna para que digan una misa por Pilar Gimeno y Pilar Navarro, tías materna y paterna a las que mucho debo. Dos baturras de temple y valía. Una pobre y otra rica. La pobre fue en la vida de simpática con la sobrinería y la rica va de simpática ahora que nos ha dejado al morir, unos ochavos. .

He terminado el día yendo a casa de Mary Ángeles, para tratar de recuperar un libro, que hace tiempo le dejé. Mary Ángeles es medio baturra y también por eso me apetecía verla hoy. Me ha dicho que todo el día se estaba acordando de su abuela Pilar, que le enseñó a decir: “Virgen del Pilar, no me dejes morir ni vivir en pecado mortal”. Me ha gustado y le he dicho que “lo postearía”.

La Virgen del Pilar es…

“La Virgen del Pilar es/ la que más altares tiene / porque no hay aragonés / que en el pecho no la lleve.”.

Con la seguridad de que será un día bonito, y tras rezar mi rosario a la Virgen, que orienta el día y pone dulzura en él me he ido a oír misa de 12 al Colegio de “El Pilar”, para estar a tono con la celebración. . Allí estudió mi marido e hizo un para de cursos mi hijo Juan. A ambos he encomendado al Beato Guillermo José Cheminade, fundador de los Marianistas y me he dispuesto a cantar con todos, estaba hasta la bandera, eso de “Te alabo Señor, de todo corazón / delante de tus ángeles, tañeré para Ti”, que resulta tan estimulante y a escuchar con paciencia, la homilía que, en este caso ha sido estupenda.

El sacerdote nos ha explicado, que la Virgen de Pilar es pequeñita en proporción con la columna ( cosa que siempre me sorprendió), porque la columna representa la solidez y el poder de Dios, sobre los que Ella está apoyada. No es Ella la protagonista. Renunció a ser protagonista de su propia vida. Dejó su protagonismo a Dios, desde el principio: “He aquí, la esclava del Señor…”. De ahí el evangelio del día. Cuando una mujer del pueblo quiere piropear al Señor: “Bienaventurado el pecho que te llevó..”, Él, que tampoco quiere ser protagonista, contesta:”Bienaventurados más bien los que escuchan la palabra de Dios y la cumplen”.

Del Padre Chaminade procede algo que a todos nos conviene pedir por intercesión de la Virgen del Pilar: “Fortaleza en la fe, Seguridad en la esperanza y Constancia en el Amor”. Buen lema el de éstos pilaristas

10 octubre, 2007

De la inquietud

Habla San Francisco de Sales, que yo no me atrevería a meterme en semejante berenjenal.

“La inquietud no es una simple tentación, sino un origen, del cual y por el cual proceden muchas tentaciones. Diré pues algo a cerca de esto. La tristeza no es otra cosa sino el dolor de espíritu que tenemos del mal que está en nosotros contra nuestro gusto, ya sea el mal exterior, como pobreza, enfermedad o menosprecio; ya sea interior como ignorancia, sequedad, repugnancia o tentación. Cuando el alma conoce que tiene algún mal, siéntelo; de aquí nace la tristeza y el deseo de librarse del mal y procurando los medios para defenderse de él . Y hasta aquí tiene razón”

“Si el alma busca los medios para librarse de su mal por el amor de Dios, buscarálos entonces con paciencia, mansedumbre, humildad y tranquilidad, esperando su libertad, más de la bondad y providencia de Dios, que de su pena, industria o diligencia. Si busca su libertad por el amor propio, se acongojará y fatigará en buscar los medios, como si este bien dependise mas de ella que de Dios.
Si no halla luego lo que desea, cae en gran inquietud e impaciencia; lo cual no quitándole el mal precedente, antes aumentándole por el contrario entra el alma en una congoja y tristeza increíble, con un fallecimiento del ánimo y fuerzas, que le parece ya su mal no tener más remedio.” (“Introducción a la vida devota”)

Y continúa disertando el santo sobre este tema y otros de interés, en los que no faltan amenas y curiosas explicaciones, que bien vendrán a quien lo leyere, si uno está por la labor.

09 octubre, 2007

El tiempo vuela

No es tópico. El tiempo vuela realmente. Siempre es de noche y hay que irse a la cama. Dios nos quita cada noche como decía Ronald Knox, los juguetes con los que tanto nos entretenemos –pido perdón a quienes trabajan como negros todo el día, aunque estos no creo que me lean- y tenemos nuestro ensayo general para la muerte. Pero no voy a ir por ahí. Trato de contar cosas que no quiero que, con el continuo sucederse de los días y sus eventos, se queden en el tintero. ¿En que tintero?

El 3 de octubre de 1932, San Josemaría haciá unos ejercicios espirituales en Segovia, en el Convento de los Carmelitas fundado por San Juan de la Cruz. (tuve oportunidad de visitarlo y pedir, por intercesión de ambos santos, algo de fuste). Durante esos ejercicios, el día 6 tuvo la inspiración de encomendar las labores apostólicas de la Obra a los tres arcángeles San Miguel, San Gabriel y San Rafael. Lo que desde luego no fue idea suya, pero fue una buena idea, es que el 6 de octubre del 2002, es decir, setenta años después, Juan Pablo II, lo declararía santo. Cumplió en su carne lo que había dicho siempre a sus hijos: “tenéis que ser santos, sin que os falte un pelo”.

Hoy 9 de octubre, se celebra en Valencia la entrada en ella de Jaime I el Conquistador. Es lo que digo yo año tras año a mi gente, valencianos todos: “vinimos los aragoneses, y arrasamos”. Cosa que me recuerda eso de “vinieron los sarracenos / y nos molieron a palos/ que Dios ayuda a los malos / cuando son más que los buenos.”. Hoy se celebra también la consagración de la Catedral que era mezquita, donde tantas misas llevo yo oídas. Nuestra Catedral, de gótico cisterciense y tres hermosas puertas: románica, gótica y barroca, es muy hermosa.

08 octubre, 2007

Refranes

A veces me acuerdo de refranes que decía mi madre, y el recuerdo es dulce. Mi madre, tenía”sombra”, mi abuela Pilar, también. Eran mujeres expresivas. Quizá sea ésta una característica de las baturras. Cuando mi hermana o yo le queríamos dar una explicación de nuestras de nuestras razones para actuar de una determinada manera, no demasiado clara, salvando nuestro amor propio ella decía, como quien se las sabe todas, con una chispa de picardía en sus ojos azules: “Se tapa muy mal el gato con el rabo”. A veces me gustaría emplear ese refrán, como muchos tan certero, cuando mis hijos me dan razonadas sinrazones que apoyan una argumentación, que no es convincente, pero mis hijos ya son doctores y aunque yo tengo frente a ellos el doctorado de la vida, que está por encima de cualquier otro. Sonrío y me quedo pensando en mi madre.

Otro que también utilizaba, para indicar que alguien era insobornable en cuanto a convicciones, tenía independencia de criterio, era : “Ese, no se casa con nadie”. Esta mañana oyendo misa en la Catedral con mi nieto Alejandro, que no tenía colegio y ha pasado la mañana conmigo, me ha venido a la cabeza no se por qué y le he sacado punta. El que se casa con alguien ya no es independiente, forma cuerpo con él. Es, como hombre o como mujer, una imagen más perfecta de Dios. Él es quien instituyó el sacramento del matrimonio, diciendo: “ Dejará el hombre a su padre y a su madre, y serán los dos una sola carne. Por eso lo que Dios ha unido, no lo separe el hombre.”. Y acabaré con otro refrán que al pelo viene sobre lo que estamos tratando: “Dos que duermen sobre el mismo colchón, se vuelven de la misma condición”. Claro que para ello hace falta tiempo…

06 octubre, 2007

El día de acción de gracias

El día 5, en la misa de 8,30 de la mañana, misa que tiene el encanto añadido de estrenar con acierto el día quienes no madrugamos, recordamos que era el día de acción de gracias. Hace poco que escribí sobre las acciones de gracias y no voy a insistir, pero si diré algo que el sacerdote nos hizo ver. Los israelitas salieron de la esclavitud Egipto, conducidos por Moisés atravesando un desierto de dragones y alacranes. En él, el Señor les alimentó con el maná, y más tarde con carne, pues una bandada de codornices cubrió el campamento. Sacó para ellos agua de una roca de pedernal. Los israelitas no pueden olvidar todas eso y creer que con sus solas fuerzas, han sido capaces de llegar a la tierra prometida. Es decir, sin la ayuda de Dios, los triunfos, de los que tan orgullosos nos sentimos, no serían tales. Como decía Joaquín García Sanz, al tiempo que sonreía: “¿soberbia? ¿de qué?”.

A las 10, después de una estupenda charradaza con Marta, fui de mandarle por correo a Maritina: “Conocer a Jesucristo”, el hermoso libro de Sheed, como regalo de boda. Pasé por unos chinos y me traje el otoño a casa. Ya que no me puedo ir al Pirineo, compré una hermosa maceta de hojas amarillas, que en un cacharro de latón hace precioso teniendo como fondo el gran espejo dorado.

A las 6 de la tarde vino del Colegio Alejandro.No salimos y le puse “Rio Lobo”, una película de vaqueros. Luego jugamos al dominó, cuando se fue, bajé un poco a la Iglesia. Allí se me ocurrió invitar a cenar a Mary Ángeles, y ya metida en faena, a Mary Luz y a Asun. Cenamos en la cocina, como hacía con mis hijos de pequeños. Al pasar al cuarto de estar para la tertulia, caí en la cuenta que junto a la imagen de la Virgen había un pequeño búcaro con cuatro jazmines frescos. Los había colocado por la mañana, sin saber que sería de mi día. Se los hice notar: había un jazmín por cada una de nosotras.

Gracias tibi Deus, gracias tibi.

04 octubre, 2007

Francisca

Esta mañana he llamado a Francisca para felicitarla. Hoy es San Francisco de Asís y ayer era San Francisco de Borja. Francisca no sabe cual de los dos s su santo. Tampoco sabe lee ni escribir, pero sabe mucho de cuentas, porque llegó a Valencia con nueve años y su maleta de cartón a “servir en una buena casa” y ahora tiene, además de marido tres hijos y dos nietos, casa, chalet otro piso alquilado y coche. Como Francisca es del Castillo de Garci muñoz, en cuya defensa perdió la vida Garcilas de la Vega, yo he decidido que su santo es el “poverello” de Asís mejor que el Gran Duque de Gandía, “aquel que de España Grande, le llamaron algún día”. El caso es que al coger el teléfono la he encontrad abrumada. No se quita el trabajo de delante. A sus setenta años, atiende a tres hombres: marido y dos hijos que más cerca de los cuarenta que de los treinta, viven en casa. Y claro, tres hombres son muchos hombres para desayuno, comida, merienda y cena y muda limpia para ir al trabajo. El marido aún hace algún recado, pero los hijos no dan un palo al agua. Ahora vienen a pasar el puente su hija con su familia y eso ha desbordado el vaso, la pobre se ha echado a llorar: “ no se leer ni escribir, siempre sin salir de casa, ni un viaje, ni diversiones, toda la vida trabajando, sin tiempo para poder salir a andar, que mis piernas lo necesitan y encima sin que nadie te agradezca nada, con malas palabras y malos modos…” He tratado de
calmarla, como otras veces. Francisca de joven sabía infinidad de historias y romances que le enseñó su abuela, en el pueblo en las largas noches de invierno. También tenía una cierta socarronería. Un día que quejándose como hoy, podía con el asunto me dijo: “A ver si cuando llegue al cielo, me van a dar también allí el mocho”.

03 octubre, 2007

Con Pilar

Quedé con Pilar en una terraza en la plaza de la Virgen, en la que hay mucho espacio para correr y palomas, muchas palomas. Dicen que han soltado en Valencia cuatro halcones porque éstas se han reproducido mucho y también que está prohibido darles de comer. Pasé de la prohibición y me llevé pan duro. Pilar venía con Juan su hijo de cuatro años, al que acababa de recoger del Colegio. Casi no hablamos, había que vigilar al niño en sus correrías y ella había dado bastantes clases en el día. El pan duro y el pequeño dinosaurio que yo había llevado a Juan, hicieron su papel. Pilar y yo nos tenemos cariño. Pese a la gran diferencia de edad, es prima hermana mía, y siempre he intentado, en nuestras conversaciones, dar razón de mi esperanza, me lo pida o no. Cosa que en el fondo agradece, aunque hayamos discutido muchas veces por ello, cuando las dos éramos más jóvenes. Pilar acaba firmar un divorcio, él que luchó denodadamente por conseguirla ( Pilar es alta, tiene un tipazo, una bonita cara y es inteligente) quiere ser libre. Y todos tan contentos. El hombre “light” del que hablaba Enrique Rojas. Ésta generación y la mía, que gracias a Dios no hemos conocido la guerra, si hemos conocido la guerra doméstica. La estúpida sociedad americana que nosotros nos tragábamos de niños en películas como “Desayuno con diamantes”,”Charada”, “Mi desconfiada esposa” y tantas más, domingo tras domingo, ya la disfrutamos aquí. Me viene a la cabeza el título de un libro que hace al caso: “Amor y Responsabilidad”, de Juan Pabl II. Pila y nos despedimos. Al hacerlo, dije que me quedaba a rezar en el oratorio del Convento de Clarisas (fundado por Jaime I el Conquistador) que estaba allí al lado: un mundo dentro de otro mundo. Le invite a entrar. “Juan – le dije al niño - te quiero enseñar una cosa bonita para que cuando venga tu yaya a Valencia, se la enseñes tu.” Pilar estuvo de acuerdo.

01 octubre, 2007

De estos días

Estos días he estado sin ordenador, y ahora mismo trabajo con el viejo en ínfimas condiciones. El caso es no perder la paciencia y mejor aún dar gracias a Dios porque todo es bueno. Justo lo leía esta mañana: el nº 268 de “Camino”:

“Acostúmbrate a elevar tu corazón a Dios, en acción de gracias muchas veces al día. – porque te da esto y l otro – Porque te han despreciado. – porque n tienes l que necesitas o porque lo tienes. Porque hizo tan hermosa a su Madre, que es también Madre tuya –Porque creo el sol
l y la luna y aquel animal y aquella otra planta. – Porque hizo a aquel hombre elocuente y a ti te hizo premioso..
Dale gracias a Dios por todo, porque todo es bueno.”

¡Chúpate esa mandarina¡ Pues no se necesitan agallas ni nada para poner en práctica estas cosas. Bueno, a lo que iba. Ayer 30 de septiembre, festividad de San Jerónimo, como ya va siendo en mi costumbre me publicaron en las “ Las Provincias”: “La nueva asignatura”, sobre la mentecatez, el “desvarío” diría yo más bien, imitando a la Vicepresidenta del Gobierno, que supone la asignatura “Educación para la ciudadanía”.
No me quitaron ni una coma, cosa que se agradece y aproveché para decir que quienes han recibido, la doctrina cristiana, están defendidos contra “otros adoctrinamientos”, porque nadie cambia oro por latón.

Ayer terminé de leer el prólogo de “Jesús de Nazaret” y justo estaba firmado el 30 de septiembre del 2006, festividad de San Jerónimo. Como muy “apañao”. Como cuando leí el prólogo de la “Historia de Jesucristo” de Bruberger que estaba firmdo en 1964, para la juventud de entonces, así decía. La deuda de gratitud que tenemos con Ratzinger, Brucberger, Sheed, Knox, Chesterton y un largo etc, es impagable. A san Jerónimo seguro que le encanta que hable de estos colegas suyos tan lejanos para él en el tiempo.

Y como no decir que hoy Santa Teresa de Liseux, Doctora de la Iglesia con 23 años. Eso es aprovechar el tiempo.
De niñas, circulaba como chiste: “¿quién es la patrona de los fruteros? – Santa Cerecita del Niño Jesús”.

No puedo dejar de contar que el 17 de mayo de 1925, Roma había exaltado a Santa Teresa del Niño Jesús y para festejar a “la pequeña Reina” la iglesia de San Pedro había sido engalanada con una suntuosidad inusitada – cuenta Trocha – y el 31 de mayo de 1925, domngo de Pentecostés, era canonizado San Juan María Vianney. Santa Teresita, presto sus galas, pr así decirlo al “pobre cura de Ars”, ambos glorias de un mismo siglo y de una misma patria, fueron envueltos en igual triunfo.