31 mayo, 2014

Para ser buena

Para ser buena, copìaré algo más de la “Autobiografía” de Chesterton, que en su día señalé con una rayita al margen para lanzarlo a los cuatro vientos en la ocasión propicia. Trata del pecado y la locura (que algo de parentesco tienen) pero mejor oírle: “ Como Bunyan que en su etapa de perturbación, se describía así mismo como dispuesto a proferir blasfemias, yo sentía un arrollador impulso de grabar o dibujar horribles ideas o imágenes, y me hundía cada vez más en una especie de ciego suicidio espiritual. Por aquel entonces nunca había oído hablar de la confesión en serio, pero eso es precisamente lo que se necesita en esos casos. Me figuro que no son casos nada raros. Lo cierto es que descendí lo suficiente como para descubrir al demonio e incluso, de una forma oscura para reconocer al demonio. Nunca por lo menos, ni siquiera en esa etapa confusa y escéptica, me abandoné totalmnente a las ideas del momento sobre la relatividad del mal y irrealidad del pecado. Tal vez cuando por fin me manifesté como una especie de teórico y me describieron como un “optiumista” fuera porque era uno de los pocos que, en aquel mundo de satanismo, creía realmente en los demonios.”

24 mayo, 2014

Belén

Belén, a la que me encuentro con frecuencia por el barrio paseando su perrito es una chica - así la conocí - que aunque rondará los cuarenta podría decirse que no tiene edad. Un halo de inocencia y juventud la rodea, creo que consecuencia de una formación cristiana recibida de sus padres, en cuya casa sigue viviendo, que han ampardo su deficiencia física: en la distinta longitud de sus piernas, y también una cierta deficiencia mental. Belén,que tiene mucha conversación y siempre está dispuesta a interpelar a la gente con la que se encuentra, si ésta le dá cuartelillo. No entiende, y eso que se encuentra, que cada uno vaya a lo suyo con prisa, urgido por la necesidad o por la indiferencia. La última vez que me la encontré, me dió una lección, sin querer dármela. Me preguntó: “¿y tu yerno?” . Al contarle con tono de voz lastimero su situación, que por otra parte él lleva con la naturalidad de quien acepta la voluntad de Dios. aunque sea dura, me contestó con sencillez y cierto desparpajo: “Cada uno tiene el papel en la vida, que Dios ha querido. Ya ves.., ¡ yo coja¡”. Me encantó oírla y le dije: “Belén, habla con la gente, les puedes hacer mucho bién” y decidí no incitar nunca a la pena a nadie, sino dar una breve crónica, de una situación difícil, lo más serena posible. Si quien me escucha es creyente puede que diga: “me acordaré”, es decir: “rezaré”. Si no lo es: “¡que todo vaya muy bien ¡”. Y aquí, paz y después gloria.

22 mayo, 2014

Lo encontraremos todo

Conservo cuanto he escrito a lo largo de la vida porque he puesto en ello alma corazón y vida y una carga apostólica más o menos considerable, manifiesta o no. Confío pués en que mi escritura prenda. No he escrito a tontas y creo en la capacidad de respuesta del que lee, cuando al que escribe le interesan los demás. Jesucristo se metió en mi barca desde niña, y sé como dice el Papa Francico que “la vida no sería igual sin Él”. Eso tiene necesariamente que notarse en mi escritura. De ahí que esté apegada a mis columnas, y sienta que se vayan al garete cuando pase la frontera de esta vida. Como decía el poeta y cantaba Paco Ibáñez: “¡Que dolor de papeles que ha de barrer el viento¡ / ¡que tristeza de tinta que ha de borrar el agua¡” Está la digitalización de periódicos, la escritura viva… Pamplinas. Nos apegamos a las cosas. “Polvo eres, y en polvo te convertirás”, nos decian el Miércoles de Ceniza al hacernos la cruz sobre la frente Hoy, que el hombre es más ligth, se dice encambio: “¡ Convertíos y creed en el evangelio¡”. Ambos buenos consejos. Creo en la resurreción de los muertos, lo del polvo no me preocupa mucho, la necesidad de conversión, es clara. Quedan las columnas… “El que quiera ganar su vida, la perderá y el que la pierda por Mí, la encontrará”. Paradojas del evangelio. Encontraremos todo lo realizado “A. M. G. D.” ( a la mayor gloria de Dios) como empezaba Juan Sebastán Bach a escribir su música.. .

19 mayo, 2014

Romería

Desde que el 2 de mayo de 1935 San Josemaría hizo una romería con dos universitarios a la ermita de la Virgen de Sonsoles (Ávila, creo) y rezaron las tres partes del rosario, en el Opus Dei, en mayo, se hacen muchas romerías solos o con amigos a cualquier lugar en que haya una imagen de la Virgen. Alegra hacerlo, rezar descansa y hay mucho que pedir. Cuando invitamos a alguien a hacer una romería queda contento y es casi seguro que al año que viene repita, de forma que las romerías pueden muy bien ser como un mar sin orillas. El 17 de mayo hice una con Mary Carmen. Era un día importante para mí: en 1992 beatificaron a San Josemaría. Pero yo no elegí la fecha, sin saberlo, la eligió ella. Yantes de hacerla caí en la cuenta con alegría que una amiga de las dos: “la Pimentel” ( la llamábamos así por su tirón y garbo de chulapa), hija de un general y que ahora vive en Madrid, había conseguido, y le costó lo suyo, que el día de la beatificación yo fuera a Roma yendo y volviendo en avión ese día. Lo que pedí, con fiereza, entonces en la plaza de San Pedro, no se me ha concedido, aún. Pero que “me quiten lo bailao” de esa oración, constante y ahora mansa, tantos años. Dios sabe más y tiene sus tiempos. A nosotros solo nos toca poner nuestra parte. El que “la Pimentel” estuviera por así decir presente en mi romería y que de algún modo yo la hubiera sustituido en su relación con Mary Carmen me hizo ver una vez más que la vida la vivimos pero no la diseñamos. Para entender mejor el alcance de esta última frase, y además disfrutarlo leer “El hecho extraordinario” de Manuel García Morente, editado por RIALP. Ah¡ y hay más: éste 17 de mayo ha estado en Roma en la Plaza de San Pedro también a las 12 (él ahora en el Angelus con el Papa y yo entonces en la Misa de beatificación) es mi hijo Quino. Dios lo ha llevado allí ese día, aunque no tenga la más remota idea de ello. Quizá tenga que ver con eso el que desde que el Papa Francisco nos lo pidió que rezaramos una avemaría por él después del Angelus, he procurado hacerlo..

18 mayo, 2014

Cartas de otro tiempo

Cuando con pocos años escribía al dictado las cartas que Luisa Moreno Bermar, ¿ qué habrá sido de ella?, enviaba a sus padres siempre las empezaba así: “Deseo que al recibo de ésta, se encuentren bién. Yo quedo bién, a Dios gracias”. Luisa estaba de muchacha, así se llamaba en casa de mis padres. Esta referencia a la salud al comienzo de una carta era la forma ritual de las que escribí entonces a quienes, viniendo de la España rural, no sabían hacerlo. Esta experiencia de infancia me hizo sonreír cuando años después, leyendo las “ Cartas a Lucilio” encontré estas palabras de Séneca: “Fue usanza antigua, llegada aún a mí tiempo, añadir a las primeras palabras de una carta: Si es buena tu salud soy contento, la mía lo es” – y continuaba - “Con igual razón decímos nosotros: si te consagras a la filosofía, soy contento. Porque ésta es a fin de cuentras, la verdadera salud; sin ella el alma está enferma y aún el cuerpo por vigoroso que sea, solamente lo es a guisa del furioso o del frenético.”. Lo dicho hasta ahora está conectado con mi vida actual, no solo porque lamente que no se escriban cartas sino mensajes, ya que sin ellas hubiéramos perdido buena parte de nuestra mejor literatura, sino porque estoy leyendo y disfrutando el reciente libro de mi hijo Juan Arnau “Manual de Filosofía portátil”, Editado por Atalanta. No necesitaba las elogiosas críticas apareidas en revistas en “El Mundo”, “ABC”, “El País”, y algunas revistas literarias, sabía que era estupendo porque llevo leídas 372´páginas de las 524 que tiene. Ahora voy por Montaigne y me cae simpático. Si, hay que leer filosofía si es que no se lee autobiografías de santos, al alma hay que alimentarla. Yen cuanto a las cartas, menos mal que si no se escriben, se escriben blogs..

12 mayo, 2014

Tarde de domingo

Cuando abría el ordenador para tratar de escribir un poco, que más preferiría sentarme en el sillón orejudo con los pies en alto y con el Documental de “la 2” de fondo, ponerme a tricotar, mi nieta Lucía, una morenita preciosa de tres años se ha acercado a mí mimosa y persuasiva diciéndo: “y yo ¿qué puedo hacer?. He visto su desamparo y me he conmovido. Los niños son inteligentes y quieren nuestro tiempo. Y aunque estaba harta de levantarme a traer papeles, pinturas, las ranitas saltarinas, cesta de juguetes, para que ella y Álvaro se entretuvieran me he levantado una vez más a sacar la Oca, con la esperanza de que me dejaran escribir un rato antes que su padre se levantara de la siesta y se hiciera con el ordenador. Pero la dulce pregunta de Lucía: “y yo ¿qué puedo hacer”, me había tocado. ¿No había sido esa la pregunta que sin palabras yo había hecho a Dios ante aquella tarde de domingo que empezaba y no tal como había programado? ¿No necesitaba yo también llenar mi tiempo? ¿ Hay tanta diferencia entre Lucía y yo? ¿No somos todos niños con nuestros juguetes esperando a Godot? . Al rato, Álvaro se echó a llorar amargamente porque “después que él había jugado a la Oca sin querer, Lucía no había querido jugar con él al parchís”. ¿Cómo iba a jugar la pobre?Optó por acurrucarse en el orejudo y oponerse a dormir.Álvaro y yo somos amgos. Tiene cinco años y medio y ya es capaz de jugar sin enfadarse cuando no gana. Jugué con él una partida de parchís y cuatro de dominó. Tiempo de juego pactado, para el que no pidió prórroga. Lo pasé bién. Luego, contenta, recordé unas palabras hermosas: “ Quien acoge a un niño en Mi nombre, a Mí me acoge”. Y concluyo ahora: por eso no es de extrañar que las madres cristianas acojan a sus hijos en su seno.

10 mayo, 2014

Él 17 de septiembre de 1982

Entre papeles que guardaba, encontré un artículo que me publicaron, junto a una foto del Papa Juan Pablo II en la contra portada de “Levante”. Salió el 17 de septiembre del 82 con motivo de la preparación del viaje del Papa a España en el mes de noviembre. Entonces su publicación me alegró mucho y ahora el encontrarlo. Verlo me sirve para agradecer haber llegado hasta el 2014, y haber visto santo a aquel papa valiente y entrañable que muchos conocimos, quisimos y formó parte de nuestra historia y de la historia del mundo. Aquellos días de San Juan Pablo II entre nosotros fueron inolvidables y pudimos seguirlos paso a paso: Ávila, Loyola, Segovia, Zaragoza, Santiago… en una televisión en blanco y negro, de la que costaba separarse. Pude ir a verlo, a Madrid a la Misa para las Familias en “La Castellana” donde, al poco de instalarse el divorcio en España, le oímos gritar con voz enérgica: “¡El matrimonio es indisoluble¡”. Lo ví también en Valencia en la Ordenación Sacerdotal en La Alameda. Por aquellos tiempos hubiera querido un hijo sacerdote.. No ha sido así, pero.. ahí están cinco nietos. San Juan Pablo II en la “ Redemptor hominis”, escrita al principio de su pontificado, nos dijo: “Jesucristo es el centro de cosmos y de la historia. A Él se vuelven mi pensamiento y mi corazón.”. En aquel artículo que escribí en el 82, con un entusiasmo fundado, figuraba esta cita de Dostoievsky:”Somos en la tierra vagabundos, y si no tuvi´ñeramos para guiarnos la preciosa imagen de Jesucristo, sucumbiríamos y nos extraviaríamos completamente como el género humano antes del diluvio”.

01 mayo, 2014

La Virgen de Montserrat

Este año la festividad de la Virgen de Monteserrat, 27 de Abril, pasó desapercibida, por caer en el Domingo de la Divina Misericordia, en el que además, caso único en la historia, se canonizaba a dos Papas a la vez. Dc los dos, muchos hemos sido contemporáneos. Total que hay muchas cosas que contar, enzarzadas como las cerezas unas a otras. Cosas que si uno descubre, ensambladas con su propia vida, puede sacar a ésta si no todo su jugo,al menos buena parte de él. Siempre me ha apenado la vida de quienes, viviendo al margen de Dios y de la liturgia pasan por el mundo sin pena ni gloria, desconociendo la alegría de los días. Como recitaba Don Mendo en su mazmorra: “todos iguales para mí seréis: trece, catorce, quince y dieciséis”. Al hilo de esto, recuerdo un viaje a Montserrat hace años, en el que Nacho, mi yerno me enseñó una canción catalana dedicada a la Vigen, que dice así: “Rosa de Abril, Morena de la Sierra…”. Éste año caí en la cuenta que por llamarme Rosa, no ser rubia y haber tenido tres hijos en Abril, aunque no pueda decir que sean tres “capullos”, pues faltaría a la verdad, como que tengo algo que ver con esa letrilla. Así que, ¿qúé quieren que les diga?, me he llevado una pequeña alegría. Me voy, hasta el día 4 de curso dce retiro a “La Lloma” ahora mismito, así que conmo decía Gila: corto y cierro. .