02 julio, 2014

De lecturas recientes

Pablo VI,hablando sobre el verdadero desarrollo,dice: “Todos los hombres, y todo el hombre”. La acabo de encontrar citada por el Papa Francisco y me viene al pelo , para lo que voy a contar: San Josemaría, cuando creó la Academia DYA, le puso ese nombre porque en ella se daban clases de Derecho y Arquitectura, pero él que siem tras ayudar a unos pobres infectados con esa enfermedad:pre pensaba en las almas así es que dijo a sus hijos que además, eran las iniciales de Dios y Audacia. Pues resulta que estoy leyendo, espero que con aprovechamiento, un libro titulado “Dios y Audacia” escrito por el Cardenal Julián Herranz fruto de sus años de juventud junto a San Josemaría. De él, estracto algo interesante: “Para evitar confusiones animaba a dejar constancia de sius decisiones de dirección por escrito. “ Yo os diré que acabe con el gobierno personal haciéndolo todo por escrito porque a veces uno me decía- “Usted ha dicho blanco” y otro “negro”. Pueden suceder las dos cosas: o que yo haya tenido malas explicaderas, o que ellos hayan tenido malas entenderderas.. O las dos cosas. Las dos muchas veces”. Para ilustrar esta idea nos contó el 1 de marzo de 1957 la historia de aquel caballero que se contagió de la sarna Tras auydar a unos pobres infectados con esa enfermedad: - ¡Qué gran caballero¡ - decía uno - ¿ Ése? ¡ Ése es un sarnoso¡ replicaba el otro. “diciéndolo por escrito – recalcaba- hemos acabad : lo que no he dicho por escrito..no lo he dicho”. Y aquello que se escribe, se piensa más y se expresa mejor.” Aquí acaba Don Julián la anécdota y yo le agradezco su libro.