03 marzo, 2011

De una visita a la parroquia

Ayer a las siete, me acerqué a la parroquia, con la idea de rezar un poco y no hubo caso, pero me llevé una alegría. La nave de la Iglesia, de buen tamaño, estaba “tomada” por los niños de la catequesis sentados juiciosamente en los bancos con el párroco a la cabeza, frente a ellos y de espaldas al altar. Dominaba, gloriosamente, la situación. Don José, – así le llamo yo, los niños le llaman Pepe a instancias suyas – con los niños es un pastor con entusiasmo, tablas y voz potente. Se nota que disfruta contándoles cosas tanto del Nuevo como del Antiguo Testamento. Poniéndolas a su altura. Cuando yo llegué Don José les contaba que hay, en países lejanos, niños a los que les falta un brazo o una mano o un pie porque han pisado una mina. Y que por eso de allí le habían mandado una imagen de un Niño Jesús al que también le faltaba un bracito y un pie. Me emocionó oírlo y desee ser mejor. ¿Nos damos cuenta de lo que tenemos viviendo simplemente con todo el equipo completo?

Al poco, era el final de la hora de catequesis, D. José rifó un cuadrito y una cruz de madera. La madre de uno de aquellos niños, de pie al final de la Iglesia, esperándolo para recogerlo, dijo un número al azar. El agraciado salió a recoger el regalo. Podía elegir. Eligió la cruz de madera de palo. Bajo del presbiterio con ella. Era un niño bien vestido: pantalón largo gris, camisa blanca, sweter azul marino. Daba gusto mirarlo. Eligió la cruz. Seguro que para su edad, sabía lo que elegía. Los niños tienen sin empañar la gracia del bautismo y las neuronas nuevas. ¿Recordará, cuando sea hombre, y como a todos le visite el sufrimiento esa cruz de madera que libremente eligió de niño?

- ¿ Por qué la señal del cristiano es la santa cruz?
- La señal del cristiano es la santa cruz porque en ella murió y nos redimió Jesucristo nuestro Señor.

Que gran labor hace un catequista, cuando se toma su trabajo en serio.