19 mayo, 2010

La “escuradeta”

El lunes llevé a mi nieta Belén, de siete años, a que viera la “escuradeta” y el tapiz de flores de la Virgen. Su madre a esa hora tenía clase de valenciano, así que todo quedaba en casa. El ambientillo de la escuradeta” alegra año tras año, tiene sabor casero, e intemporal y hace que la Plaza de la Reina, funcione como tal. El resto del tiempo, tiene bastante poco de plaza: la gente sigue circulando, como siempre, por las antiguas calles de Zaragoza y Campaneros. Esta vez, entre los mil y un pucheros, cuencos, jarros, botijos, y abundante cerámica brillando al sol, encontré un azulejo en el que se leía: “Dios nos ha dado un día bonito. Ya habrá alguno que venga y lo jo…”. Después de la sonrisa, para tener en cuenta la advertencia, porque la verdad es que Dios nos regala cada día un nuevo sol y una nueva luz. No es verdad lo de “la misma playa y el mismo cielo”, que cantaba no se quien, porque Dios no se repite. Tenemos pues por delante un hermoso día, si el malhumor de alguien no nos lo gafa, y el trabajo deja respiro. Y como esta feo hacer a los demás, lo que no se quiere para uno: no fastidiemos el día a nadie. Y, a más a más, quizá incluso podemos alegrárselo a más de uno, viviendo el “Sonría, vaya alegre por la vida”. Consejo que, a los que hoy somos viejos, nos daba reiteradamente la primera tele en blanco y negro.La tele de: “A fondo”, de “Estudio Uno”, y del: “ ..ya va siendo hora de que los peques nos vayamos a la cama, ¡hále”. Una tele entrañable.


( Enviado a "Las Provincias")