24 mayo, 2009

"¡Habla de Jesucristo¡"

“¡Habla de Jesucristo¡”, me dijo el viernes pasado un sacerdote – de esos que hacen sus buenas horas de confesonario - cuando le dije que tenía un blog. Al oírlo, pensé : “¡Ahí es nada¡”. En mi vida siempre está Él ahí. Cuando escribo no se va, aunque “como la carne del burro no es transparente”-así decíamos en el colegio cuando una tapaba el sol a otra -, a veces reconocerlo en mi escritura. Parodiando a Chesterton que cuando le preguntaron por las razones de su fe, se quedó apabullado por la cantidad y dijo: “ mi fe es grande y sólida. Firme como una catedral”, yo podría decir sin Jesucristo, la vida sencillamente no tiene sentido. Podría suscribir lo que dice Holzner:

“El mundo es una mascarada mísera y repugnante, a cuya cabeza la mentira y la falta de principios enarbolan los estandartes de la estupidez. Lo único que hace la vida digna de ser vivida es la fidelidad de Dios a su palabra, que culmina en Cristo y en su Iglesia. Sin esto, según las drásticas palabras dee Bismark, por la vida no vale tan solo la pena de cambiar de camisa”.

Hoy es la Ascensión: “¿Varones de Galilea: ¿qué hacéis ahí plantados mirando al cielo? El mismo Jesús al que habéis visto subir al cielo, volverá como le habéis visto marcarse”. (Hech.1-11). Su último consejo antes de irse ( y quedarse, porque en el sagrario lo tenemos): “Id al mundo entero y proclamad el Evangelio a toda la creación. El que crea y se bautizare se salvará, el que se resista a creer será condenado.” (Mc 16,15)

Hoy es un buen día para pedir bautizos.