25 junio, 2007

25 de junio de 1944

Nunca llega un 25 de junio sin que recuerde que el 25 de junio de 1944, yo tenía cuatro años, se ordenaron los tres primeros sacerdotes del Opus Dei. Después de ellos muchos más, si arriesgara una cifra me equivocaría.
Es una multitud de hombres, buenos profesionales en el desempeño de una
su profesión civil, a quienes san Josemaría ha llevado al sacerdocio, para
“servir a la Iglesia”, para ayudar en su camino hacia el cielo a sus hermanos los hombres, ( me niego a tener que decir: y mujeres. Estamos haciendo un mundo de tontos en el que hay que nombrar lo que es obvio). Son muchos
los sacerdotes del Opus Dei a quienes Dios ha puesto en mi camino desde mi juventud: Don. Justo Luis, D. Salvador, D. Antonio, D. Francico, D. José Mª, D. Juan Fernando, D. Rutger (holandés que habla un magnífico castellano) y tantos otros. Algunos de ellos están ya en el cielo. Todos me han ayudado a seguir “pa lante” o como diría una andaluza graciosilla: “anda, que Dios te lo manda”.

En un día como hoy se ordenaron: Don Älvaro del Portillo Ingeniero de Caminos, D. Josemaría Hernández Garnica, Ingeniero de minas y D. José Luis Múzquiz, creo que Ingeniero Industrial. Ellos abrieron brecha. D. Álvaro y D. Josemaría están en proceso de beatificación. D. Jose Luis, no lo sé. Me enteraré.

Siempre he querido tener un hijo sacerdote. De momento, no lo tengo. Pero tengo dos nietos... El mayor Alejandro de nueve años está conmigo hoy. El con su ordenador y yo con el mío. Alejandro como ya he dicho, es ruso. Veremos.