07 julio, 2014

Salomé

Salomé es lituana, abogado, no llegará a los 30 y habla correctamente castellano. Vino a Palma de Mallorca a cuidar unos niños y ha aprenderlo. Había coincidido muchas veces con ella en el círculo de estudios – un medio de formación del Opus Dei al que acudímos ambas - y debido a la la timidez que una gran diferencia suele producir en ambas partes, no había intercambiado con ella más que sonrisa y saludo. Sabiendo, como sé desde siempre que la sociabilidad es mejor que la reserva, hace poco la abordé: “¿ Lituania o Letonia?”, “Lituania” – contestó-. “¿Vilnius?”. “Sí” - dijo alegremente -. “Pues mira – dije, ya lanzada – el Director espiritual, del Opus Dei de Estonia, Letonia y Lituania es D. Pablo Gil Nogués, hijo de Eugenio y Maria Matilde, compañeros de carrera míos. Yo acudí a su ordenación sacerdotal hace años.” Sonrió ampliamente: “ He leído eso en un blog…” – me dijo -. Las dos estábamos asombradas. Yo no tengo ni idea cuando conté algo de Pablo en el blog porque, como quien no quiere la cosa, “El rastro” va por el mundo desde el 2005. Ella, sin dejar de sonreír, dijo “¡Quién me iba a decir a mí que iba a acabar conociendo a la autora…, que iba a ser de su grupo..”. ¡ Estoy deseando tomarme un café con Salomé cuado consiga su móvil. Habrá mucho que contar. Por otro lado he sabido que pertenece al Opus Dei desde hace dos años y, que no era practicante. Lo conoció en Palma de Mallorca através de un chico con quien salía, cuyo talante le gustaba. Con el chico, no llegó a nada y llegó a todo porque él facilitó la dirección de un Centro de mujeres del Opus Dei, al que acudió. Después, Dios hizo el resto. Salomé no solo recuperó la fe sino que pidió pidió la admisión a la Obra y es ahora en ella, la primera mujer lituana. En su paso por Valencia.. me conoció a mí. Volverá a Lituania después de asistir a la beatificación de Don Álvaro del Portillo y yo más de una vez, rezaré porque Salomé en su tierra, tenga muchas compañeras de camino.