12 mayo, 2011

Convivencias

Esta semana estoy de convivencias y oigo logicamente muchas cosas bonitas. Entre ellas esta anécdota del Papa Juan Pablo II que voy a tratar de contar:

Uno de los Obispos que tenía que hacer la visita “ad limina” al Papa, llegó tarde a la entrevista, el Obispo le dijo al Papa: “ Perdóneme Santidad, pero es que al venir me he encontrado a un compañero mío de Seminario, sacerdote, convertido en mendigo. Me ha abordado él, yo no lo hubiera conocido.” El diálogo entre el Papa y el obispo se desarrolló más o menos a así:
- Se habrá quedado con una dirección suya para poder encontrarlo.
- No, Santidad
- Pues váyase ahora mismo trate de encontrarlo y traigálo.
El obispo se fue y encontró al mendigo dionde lo había dejado. Lo llevó al Vaticano y lo dejó solo con el Papa. Éste le dijo:
- Querría confesarme con usted.
- Santidad no tengo licencias para esta diócesis y además estoy suspendido suspendido.
- Yo puedo arreglar eso. Usted es sacerdote ¿no? Pues entonces puede confesarme.
El Papa se confesó con él y luego el sacerdote indingente se confesó con el Papa. Después éste lo restituyó a su ministerio y le encargó la labor apostólica con los mendigos de Roma.

Más cosas bonitas:

En la J.M.J ( Jornada Mundial de la Juventud) que se celebrará, Dios mediante el 18 de agosto en Madrid, van a poner en el Parque de El Retiro ( que podrá llamarse desde entonces el Parque deel Perdón) mil confesonarios portátiles, que al día siguiente se colocarán en el aérodromo de Cuatro Vientos. Tremendo
En dicho aérodromo también se colocarán 40 carpas para que en cada una de ellas pueda estar el Santísimo en la custodia y todos cuantos quieran puedan acompañarlo.