08 julio, 2010

Lo que hace Dios

Estoy leyendo como lectura espiritual “Vivir la misa” de Javier Echevarría. Ayuda mucho para valorarla y vivirla mejor y es un libro ameno, por lo bien documentado que está con citas bien escogidas, cortas y claras de Benedicto XVI, San Agustín, el Misal Romano, San Josemaría, San Isidoro de Sevilla… A las pocas líneas del primer capítulo se lee lo siguiente:

“Benedicto XVI recuerda en una homilía un breve relato tomado de la literatura universal. Un rey quiso saber cómo es Dios y pidió a los sabios y sacerdotes de su reino que se lo mostraran. Como es lógico no fueron capaces de cumplir ese deseo. Pero un po bre pastor ofreció una solución:
aunque ni siquiera los ojos del rey bastaban para ver a Dios, él podría mostrarle al menos lo que hacía Dios; y le propuso intercambiar los vestidos. El rey accedió y entregó sus vestiduras reales al pastor, mientras que él se puso la ropa campestre. “Esto es lo que hace Dios” fue la respuesta del pastor.

“ En efecto – comentaba el Papa -, el Hijo de Dios, Dios verdadero de Dios verdadero, renunció a su esplendor divino: “Se despojó de su rango y tomó la condición de esclavo, pasando por uno de tantos. Y así, actuando como un hombre cualquiera, se rebajó hasta someterse incluso a la muerte ( Flp2, 6 y ss)” . Como dicen los santos padres, Dios realizó el “sacrum commercium”, el sagrado intercambio: asumió lo que era nuestro, para que nosotros pudiéramos recibir lo que era suyo.”

Mientras copiaba estas líneas se me ha ocurrido pensar que Dios es el peor comerciante del mundo. Y también que eso es así, porque es Padre. .