Amnistía Internacional

“El Cardenal Renato Martino, presidente del Consejo Pontificio Justicia y Paz ha anunciado que los católicos no financiarán Amnistía Internacional (AI), que ha comenzado a apoyar el aborto como un derecho humano y ha pedido a los gobiernos que lo despenalicen en algunos casos. Como AI, de acuerdo con su estatuto internacional, no recibe dinero de los Estados, la invitación del cardenal Martino se dirige a las organizaciones católicas y a los católicos a título individual. El Cardenal denunció que (AI) ha cedido a la presión de los lobbies que promueven la “cultura de la muerte” y se “descalifica como defensora de los derechos humanos”. El cardenal recordó que no existe un derecho al aborto reconocido internacionalmente, y explicó: “Justificar el aborto en casos específicos, incluso el de violación, significa definir al niño inocente, dentro del seno materno como un “enemigo”una “cosa” que hay que destruir”.”

(Palabra, julio 207. Nº524 )


Tristes tiempos, tristes, cuando una organización, como (AI) cuya razón de ser fue el defender la vida del hombre de la injusticia y el atropello, se haya dejado arrastrar, tan en contra del sentido común (las ecografías, de uso corriente en las embarazadas, permiten ver al niño formado desde las primeras semanas ) y de la bondad más elemental ( si un niño no está a salvo ni siquiera en vientre de su madre ¿qué destino le espera al ser humano?). Mucho podríamos hablar del tema.