08 julio, 2008

Entre comillas

Me han gustado estas palabras que sobre sí mismo dijo Jaques Maritain:
“ ¿Quién soy yo? ¿Un profesor? No lo creo: enseño por necesidad. ¿Un escritor?
Tal vez. ¿Un filósofo? Lo espero. Pero también una especie de romántico de la justicia
Pronto a imaginarse, después de cada combate, que ella y la verdad triunfarán entre los hombres. Y también quizás, una especie de zahorí con la cabeza pegada a la tierra para escuchar el rudo de las fuentes ocultas y de las germinaciones invisibles. Y también, y como todo cristiano, a pesar y en medio de miserias y fallos, y de todas las gracias traicionadas de las que tomo conciencia en la tarde de mi vida, un mendigo del cielo disfrazado en guisa de hombre del mundo, una especie de agente secreto del Rey de Reyes en los territorios del príncipe de este mundo, que decide arriesgarse como el gato de Kipling, que caminaba solo.” (J. Carnet de notes. Cita encontrada en el prefacio de “Humanismo integral” de j. Maritain.


“Maritain pasó de un protestantismo poco ferviente al agnosticismo y a plantearse de modo dramático si la vida tenía sentido. De esta situación le sacaron los encuentros con varias personas. La primera fue León Bloy una figura atípica y muy original de cristiano-asceta-literato que influyó mucho en Maritain y en su esposa Raïssa, especialmente en la conversión de ambos al catolicismo.” (del prefacio citado)