19 mayo, 2017

Capitalismo y familia

Me acabo de comprar “El amor o la fuerza del sino”, de G.K. Chesterton, ed. Espuela de plata. Bajo el título se lee: Ensayos y poesía sobre el matrimonio, el amor, los niños, el divorcio y la Navidad. 17, 90 euros. A los que seguro que saco partido. Abro al azar, a guisa de aperitivo de una lectura sustanciosa y me encuentro: “Es imposible repetir demasiadas veces que lo que ha destruido a la familia en el mundo moderno es el capitalismo. No hay duda de que podría haber sido el comunismo, si el comunismo hubiera tenido la oportunidad de crecer fuera de ese desierto mongólico en donde de hecho florece. Pero por lo que aquí respecta, lo que ha roto los hogares y fomentado los divorcios, y lo que ha tratado las viejas virtudes domésticas con más y más desprecio ha sido el capitalismo. Es el capitalismo el que ha forzado una contienda moral y una competición comercial entre los sexos; el que ha destruido la influencia del padre a favor de la influencia del patrono; el que ha sacado a los hombres de sus casas para encontrar trabajo; el que les ha forzado a vivir cerca de sus fábricas o de sus firmas comerciales en lugar de hacerlo cerca de sus familias; y sobre todo el que ha fomentado por razones comerciales toda una procesión de publicidad y novedad ostentosa que en sí misma lleva la muerte de todo lo que nuestras madres y padres llamaban dignidad y modestia…” En donde dice padres y madres, léase abuelas y abuelos. Chesterton murió en el 36 (Dios le evitó la Segunda Guerra Mundial que destrozó Europa) y la que suscribe nació en el 40. Y la que suscribe le dice con su mejor acento: ¡Viva tu madre¡