24 enero, 2013

"Estaba allí la madre de Jesús

La madre de Jesús estaba allí Maribel y yo somos amigas desde los diecinueve años…,cuando las dos estudiábamos Químicas, éramos ambas espigadas y de buen ver y teníamos a nuestros respectivos novios estudiando en Madrid: uno Ingeniería Industrial y el otro Arquitectura. Maribel y yo, desde nuestra madurez, hemos hablado mucho de Religión, pero no siempre con la humildad debida, cada vez que tomábamos un “cortado” juntas, a ser posible en una terraza al sol. Y especifico ésta circunstancia, al parecer baladí, porque honra a muchas mujeres de mi generación, el quedar con una amiga, no para comer con más o menos sibaritismo - como hacen los varones- sino el ser capaces de hablar de todo lo humano y lo divino sin más estímulo que una taza de café. Añadiré que ni Maribel ni y yo fumamos ni bebemos, gracias a Dios, y a quienes nos educaron. No puedo dejar de decir que la mujer debe ser la fortaleza del hombre. Dicho esto, cuento lo que me ha llevado a escribir estas líneas. Me dijo, casi al empezar la conversación: “leyendo el evangelio del día, que lo hago siempre, que era el de las bodas en Caná de Galilea, me encontré con una frase preciosa: “la madre de Jesús estaba allí”. Al decirla, se le iluminaron los ojos, que los sigue teniendo muy bonitos. Sonrió, mientras continuaba: “estando allí la madre de Jesús nada malo podía ocurrir”. Me pareció hermoso, pensé que lo contaría. Al hacerlo, una aparente objeción me viene a la cabeza: también estaba la madre de Jesús al pié de la cruz… Pero enseguida he reaccionado: allí se estaba realizando la Redención del mundo. Nosotros no vemos las cosas como las ve Dios. En evangelio de San Juan, empieza así: “Había una boda en Caná de Galilea y la madre de Jesús estaba allí; Jesús y sus discípulos estaban también invitados a la boda.” ¿Hay una manera más breve y expresiva de introducirnos en la escena? Estoy convencida de que la lectura asidua del evangelio enseña a escribir. El caso es que con nuestras “peleas” en la manera de entender la fe y del particular compromiso con ella, las dos nos hemos ayudado bastante la una a la otra a mejorar, A lo largo de la vida, a fin de cuentas eso es lo único que importa.