19 octubre, 2012

Me ha parecido bien

Un cuarto de hora al día, estoy leyendo un pequeño manual sobre Doctrina Social de la Iglesia. ( “Cristianos en sociedad”). No siempre hay que leer cosas amenas, como en la comida no solo comemos chocolate. Leyendo éste, me acabo de encontrar este párrafo: “Atentar contra la vida – homicidio de cualquier clase, genocidio, aborto, eutanasia y el mismo suicidio deliberado – violar la integridad de la persona humana, como: en las mutilaciones, las torturas morales o físicas, los conatos sistemáticos para dominar la mente ajena; ofender la dignidad del hombre con condiciones infrahumanas de vida, detenciones arbitrarias, deportaciones, esclavitud, prostitución, trata de blancas y de jóvenes; o condiciones laborales que degradan y reducen al operario al rango de mero instrumento de lucro, sin respeto a la libertad y responsabilidad de la persona humana, son prácticas en sí misma infamantes, degradan la civilización humana, deshonran más a sus autores que a sus víctimas y son totalmente contrarias al honor debido al Creador.” (“Gaudium et spes”, sobre la Iglesia en el mundo; Concilio Vaticano II) Como es sabido acaban de cumplirse cincuenta años del inicio del Concilio Vaticano II y veinte de la publicación del Catecismo de la Iglesia Católica, bueno será pues, de vez en cuando, ir haciendo memoria de uno y otro