24 abril, 2011

Alégrate Virgen María

“Alegrate Virgen María, ¡Aleluya¡ / porque el que mereciste llevar en tu seno / resucitó, como había dicho”

¡Felices Pascuas¡

Hoy habrá que ir a “felicitar a la Virgen” - como dicen que se hace en Cuenca y habrá que rezar mejor – los que tienen tan buena costumbre – libro el rosario. Misterios gloriosos.

Levantarse con salud, desayunar torta de pasas y nueces – para celebrar el día – y leer algo de lo que Josehp Ratzinger (Benedicto XVI) a escrito sobre la resurrección de Cristo en su último y estupendo libro: “ Jesús de Nazaret”, es realmente estar “in”. Lo agradezco.

Transcribo el primer párrafo del capítulo 9: “LA RESURRECCIÖN DE JESÚS DE ENTRE LOS MUERTOS”:

“Si Cristo no ha resucitado, nuestra predicación carece de sentido y vuestra fe lo mismo. Además como testigos de Dios resultamos unos embusteros, porque en nuestro testimonio le atribuimos falsamente haber resucitado a Cristo” (1 Co 15,14s). San Pablo resalta con estas palabras, de manera tajante la impoortancia que tiene la fe en la resurrección de Cristo para el mensaje cristiano en su conjunto:es su fundamento. La fe cristiana se mantiene o cae con la verdad de que Cristo ha resucitado de entre los muertos.”

Los niños, educados en la fe de su bautismo, tienen la fuerte convicción de que después de la muerte, volveremos a ver a quienes quisimos en la tierra.
Convicción impagable. Ésta me acompañó vivamente cuando murió mi padre - yo tenía 17 años – y quitó dramatismo a mi separación de él: había sido un hombre bueno, lo volvería a ver en el cielo. Después noté su protección, sin estar conmigo. Mi amiga Mary Ángeles, también me contó una vez, que cuando murió el suyo – también hombre religioso y estudioso – le dijo poco antes de morir: “No te preocupes Mary Ángeles: Nos volverempos a ver.” Marý Ángeles, hija única tenía entonces 25 años.