No hay mal que por bien no venga

Como había perdido el anterior, fui a sacarme un duplicado del carnet oro de EMT, pues así puedo coger al año cuantos autobuses quiera, solo por 20 euros . Esta bicoca, es algo que las personas mayores debemos agradecerle a la simpática y alegre Rita Barberá, anterior Alcaldesa de Valencia. Dios se lo habrá tenido en cuenta, ya que nos hizo una especie de obra de misericordia: que podamos trotar de aquí para allá, como niños despreocupados y felices, los que ya se cansan. Pocos días de perderlo, miré la foto me di cuenta que estaba casi borrada de tanto tiempo que lo tenía pero resultaba neblinosa y poética y me gustaba, cosa extraña porque a nadie le gustan sus fotos de carnet, y este hacía su papel.lo coloque agradecida en departamento del bolso y ya nunca más se supo. Así pues, para remediar tamaño desaguisado, con un sol de justicia de las cinco de la tarde, me encaminé a la plaza de Correo Viejo nº 5 a por el un duplicado, previo pago de 5 euros. No sin antes hacer una visita a la Iglesia de San Juan del Hospital, que el día 24 de junio celebró solemnemente sus cincuenta años de servicio a las almas. Servicio que agradecemos jóvenes y mayores porque sus puertas están abiertas todo el día, todos los días del año y su culto no varía en verano. Como decía el hermano Conrado (capuchino): “Las iglesias deberían estar abiertas todo el día, como los bares por si alguien quiere reponer sus fuerzas. En la EMT me recibieron amablemente y hubiera abrazado gustosa a la señorita que me dio el duplicado. Salí contenta y disfruté, como en mis años mozos, recorriendo: la Calle Caballeros, La Almoina.. y tanta hermosa arquitectura de la que está sembrada la Valencia antigua.