16 octubre, 2017

Gente

Hace tiempo, en el programa de Tv “Lágrimas en la lluvia” que tan buenas tardes de domingo nos hizo pasar, un simpático tertuliano médico de gran humanidad física y de la otra padre de catorce hijos, dijo satisfecho que su madre le había enseñado a rezar de esta manera: “Señor te doy gracias por haberme creado, redimido, hecho cristiano y conservado hasta este día.” . Me encantó oírlo y después de años lo recuerdo y lo cuento. Teniendo esto claro puede uno reír a gusto y hasta si es hombre echar barriga, como el bendito tertuliano. Hay gente que hable o no, deja huella. En mi caso, y pienso que en el de muchos esa gente, es mucha gente, y eso acobarda un poco por aquello de la propia responsabilidad a la hora de rendir cuentas… Citaré algunos nombres, la mayoría de esas personas están ya en el cielo: Carmelo y Rosa (mis padres), Pilar Gimeno, Pilar Navarro, Sabina Alandés, Aurora Paz, Vicky, Maruja, Maribé Urrutia, Tere …la Madre Pilar de Felipe, del Espíritu Santo, la Madre Mª Asunción Nebot de la Santísima Trinidad…Y algunos sacerdotes: D. Benjamín Civera, D.Enrique Sorando, D. Justo Luis, D. Jesús Zaera, D. Francisco Balibrea, D. Manuel García, D. Enrique Más, D. Eduardo Labrandeira.. Mucho que contar y mucho que agradecer.