27 mayo, 2008

Sonsoles

Me alegré que Zapatero se fuera de romería al pueblo de donde era su abuelo, el capitán Lozano. Al enterarme, caí en la cuenta de que su mujer se llama Sonsoles y hete aquí que a la ermita de la Virgen de Sonsoles, en Ávila, acudió en romería no bulliciosa, porque iban tres personas en total, San Josemaría Escrivá el 2 de mayo de 1935. Los romeros salieron de Madrid para Ávila en el tren de las 8 de la mañana y luego recorrieron a pie los cuatro kms que les separaban de la ermita. Al estar ésta elevada, pudieron ir atajando por los campos, sin seguir la carretera porque veían en que dirección tenían que ir. Aunque por incidencias del terreno hubo un momento que dejaron de verla, como antes la habían visto no se desorientaron. Ocasión que le sirvió al Fundador del Opus Dei para decir que cuando se ha visto claro lo que Dios quiere de uno, aunque después desaparezca la estrella hay que seguir adelante en el rumbo tomado, porque la estrella ( la llamada de Dios) está ahí aunque no la veamos. Llegaron a la ermita porque el no verla no suponía que hubiera desaparecido. Los romeros, iban para agradecer un favor que le había hecho la Virgen a Ricardo Fernández Vallespín, arquitecto, que era uno de los romeros. Rezaron una parte de rosario de ida, otra ante la Virgen y otra de vuelta. Desde entonces en el mes de mayo miles de romerias así, se dan en el mundo entero. Mucho me gustaría que ZP supiera estas cosas realmente sugerentes.